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IGLESIA CONVENTO
NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN
Padres Carmelitas
CHILLAN


IGLESIA CONVENTO NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN - CHILLAN

Los Carmelitas Descalzos llegaron a Chile en 1899, siendo autorizados por el el Gobierno y el Arzobispo de Santiago, monseñor Mariano Casanova, para fundar su primera casa en Santiago el 9 de marzo de 1900.

El 28 de junio de 1900 se instalan en Valparaíso y en 1905 es autorizada la Orden para fundar una casa en Chillán.

LA PRIMERA IGLESIA Y CONVENTO CARMELITA DE CHILLAN

El padre Lázaro de la Asunción en su “Historia del la Orden del Carmen Descalzo en Chile 1899-1935”, relata que a principios de octubre de 1901 llegó a Chillán el primer carmelita, el padre Juan Martín de San José, quien se hospedó en casa del párroco de la ciudad, el padre  Vicente Las Casas, devoto de la Virgen del Carmen, y quien “soñaba ya con una Comunidad Carmelitana dentro de su feligresía. Por eso hizo venir de la capital un padre para solemnizar la Novena patriótica de la Virgen del Carmen”.

Predicaban por entonces juntos las novenas en la Parroquia San Bartolomé de Chillán, donde el padre Juan exaltaba patrióticamente a la Virgen del Carmen como Patrona de los Ejércitos de Mar y Tierra de Chile, hermosos discursos que según contaban los fieles perduraron en el recuerdo varias décadas.

El padre Juan atendió también a las Religiosas de los Sagrados Corazones, que tenían el Colegio Hijas de María en la Avenida O'Higgins.

Por gestiones del padre Vicente, un día llegó ante el padre Juan, un vecino de Chillán que le ofreció una casa con una huerta donde poder fundar la Orden Carmelita en la ciudad, lo que facilitaría las misiones en la zona sur, ya que los carmelitas debían transitar casi directamente entre los conventos de Santiago y Valdivia.

En enero de 1904 llegó a Chile el Visitador Carmelita de América, dirigiéndose a Chillán con la intención de conocer el lugar donde se haría la fundación. Sin embargo, no quedó muy a gusto y de regreso en Santiago, se reunió con algunos padres carmelitas, logrando luego en conjunto aprobarla.

Entre enero y marzo de 1905, los carmelitas hallaron la oposición de los religiosos franciscanos y mercedarios, quienes se negaban a que la Orden se instalara en Chillán.

Solicitando los permisos correspondientes a Roma y a la Jefatura Carmelita, el 12 de febrero de 1905 se declaraba erigida canónicamente la fundación, iniciándose la construcción de la capilla y del convento a cargo del hermano carmelita arquitecto Cirilo de la Cruz.

Para la nueva fundación habían llegado desde Santiago en enero de 1905 los padres Telésforo y Estanislao y el hermano Cirilo de la Cruz; en febrero los padres José Antonio de la Purificación, Agustín de San José y Fortunato de la Purificación, y los hermanos Santiago de Santa Teresa y Faustino de la Virgen del Carmen; y en marzo el padre Benito de la Eucaristía.

Bendecido el Convento por el párroco Vicente Las Casas, el 31 de marzo de 1905 quedó constituida la primera comunidad carmelita de Chillán. Como Vicario fue nombrado el padre Telésforo de los Apóstoles, que sirvió hasta el 3 de julio de 1906. Sucesores fueron los padres Ludovico de San Joaquín, 1906 a 1907; y Estanislao de San Juan de la Cruz, 1907 a 1912.

Meses después, para honrar el Nacimiento de Jesucristo, el 25 de diciembre de 1905 durante la Misa de Navidad se dio por inaugurada la capilla.

El padre Lázaro de la Asunción cuenta: "La Iglesia era una extensa enramada en forma de cuadrilátero de dos metros de altura, cuyo techo formaba en gran parte una antiquísima parra. En el extremo de aquella enramada se destacaba una larga mesa destinada a la celebración del Santo Sacrificio, sirviendo de retablo una tela blanca con magnífico encaje, en cuyo fondo aparecía un cuadro sencillo, pero devoto, de Ntra. Sra. la Virgen del Carmen, adornado con simpatía y sencillez por aquellos sus hijos, con flores naturales. Esta era la Iglesia o templo al cual acudían con singular devoción los habitantes de aquellas soledades. Aquí celebrábamos el Santo Sacrificio, administrábamos los santos Sacramentos del bautismo, matrimonio, confesión y comunión a considerable número de personas. El sueño de los Padres era una nueva Iglesia y un Convento de nueva planta. Mientras tanto no estarían satisfechos”.

LAS NUEVAS DEPENDENCIAS DE LOS PADRES CARMELITAS

La Comunidad Carmelita estaba situada en Avenida Brasil esquina de Talcahuano. A inicios de 1906, el padre Vicente les había propuesto permutar la casa actual por otra que el mismo dueño, Isidoro Toro, tenía en calle Constitución esquina Rosas.

Aceptada la propuesta el día 31 de enero de ese año, el párroco Vicente, el Intendente, una Banda Militar, un piquete del Regimiento y miles de fieles; llevando en procesión a la Virgen del Carmen y a San José, acompañaron a los carmelitas hasta su nueva casa. Al día siguiente, que era domingo, se cantó una Misa solemne.

Los carmelitas se habían organizado de tal forma ante la devoción de los chillanejos, que entre 1907 y 1908 se habían formado diversas cofradías y sociedades, como la de la Virgen del Carmen, del Niño Jesús de Praga, de Santa Teresa de Jesús y del Sagrado Corazón de Jesús.

Instalados en Chillán, a medio camino entre Santiago y Valdivia, los carmelitas salieron a misionar al norte llegando a Rancagua y hacia el sur alcanzando Puerto Montt. En 30 años los carmelitas sumaban también, 200 misiones en La Araucanía, Chiloé y Magallanes.

Los carmelitas de Chillán mantuvieron desde siempre una estrecha relación de amistad con el más notable de los devotos de la Virgen del Carmen y gran orador espiritual, el obispo Ramón Angel Jara.

En abril de 1906 había tomado sus votos solemnes el hermano Faustino de la Virgen del Carmen, siendo el primer sacerdote carmelita ordenado en Chillán.

LA NUEVA IGLESIA CARMELITA

El 2 de agosto de 1907 el padre Estanislao impuso la idea de la necesidad de edificar un digno templo para la Virgen del Carmen. Fue así que la Comunidad Carmelita compró la casa de Isidoro Toro y otra cercana, las precisas para edificar el nuevo convento y acomodar el refectorio y la biblioteca. El 20 de octubre se aprobaba el presupuesto, que además se vio beneficiado con la donación que hizo el Diario “La Nación" al instalarse en Chillán y la ayuda del Convento Carmelita de Santiago.

El 12 de diciembre de 1910 se llevó a cabo la ceremonia de bendición de la primera piedra. El templo fue concluido y consagrado el 6 de julio de 1913 con una Misa Pontificial y con la asistencia de numerosas autoridades civiles y religiosas.

El padre Lázaro de la Asunción relata: "A las nueve de la mañana, hizo su entrada solemne en el nuevo templo el Iltmo. y Rvdmo. Mons. Ricardo Sepúlveda, Obispo de Sófene... Después de bendecida la Iglesia y la imagen de la Virgen del Carmen, que en el fondo del altar se destacaba graciosamente en rico Camarín profusamente iluminado,...”

Sobre las características del templo, el padre Lázaro detalla: "El templo es amplio, soberbio, de estilo gótico puro. El autor... ha hecho brillar a maravilla sus conocimientos arquitectónicos... y ha sabido combinar con maestría y arte y derramar a raudales en su ejecución las galas de la inspiración y de la gracia. Las ojivas, los ventanales y las columnas le dan un aire de señorío artístico... Muy bien por el Hermano Rufo de San José, que lo ha sabido concebir... El interior de la Iglesia tiene su planta de tres naves, llenas de esbelta y graciosa proporción, con bóvedas de crucería. La nave central está formada por catorce columnas compuestas de haces de doce columnillas, doce de éstas más altas que las dos que soportan el coro; los capiteles son de adornos de hojas de cardos. Las naves laterales tienen medias columnas de haces adosadas al muro para unir sus nervios como en las de la nave central y rematan claves de acantos y cabezas de ángeles al centro... En los ángulos de los arcos hay unos motivos en relieve, como asi entre las columnas de la galería... El ábside está en parte completado por la continuación de la arquería de la nave central, que, aquí, sólo alcanzan a la mitad de su altura... La nave central tiene dieciséis metros de alto por ocho metros y medio de ancho, por cuarenta y tres de largo. Las laterales ocho por cuatro y medio de ancho, el vértice de las ojivas de los arcos de la nave de en medio llegan a siete y medio metro. El Camarín de la Virgen del Carmen está en el muro detrás del altar mayor en obsequio al mayor culto de la Patrona jurada, ya que el rigor del estilo ojival no admite allí ni los prodigiosos retablos de España e Inglaterra... Las vidrieras son obra de don Alfonso Serra, de Barcelona, en número de diecisiete con la gran rosa del coro. Costaron 12 mil pesetas. Son de bonita ornamentación gótica... Circundan los santos de la Orden, cuyos hábitos color sombra o Sienna... En los del ábside está el Sagrado Corazón y el Niño de Praga de tonalidades más intensas... El altar mayor es una admirable obra de talla y una feliz interpretación del gótico florido, obra del Hermano Mariano, Carmelita... La madera está encerada, color nogal oscuro, con las aristas ricamente doradas. El tallado del Comulgatorio y de la balaustrada del coro son de Carrasco, chileno; y los del púlpito de Castañer, español... La imagen del Camarín es una notable obra en madera policromada de Ildefonso Serra, artista laureado en varias exposiciones en Barcelona. Costó seis mil pesos. El rostro da una perfecta idea de la celestial Señora... El Niño Dios es un acierto de gracia y de bondad divinas. Sobre la peana de nubes en que descansa la imagen hay unos angelitos... La fachada tiene dos torres de cuarenta metros cada una... terminan en cruz; no es un lis o trepadera de cuatro hojas, como es de rigor en este estilo; descansan sobre la base octogonal con cuatro ventanales... El arquitecto fué el Hermano Rufo, Carmelita, secundado hábilmente por el Hermano Ciríaco. Ambos no cursaron arquitectura, pero han demostrado una elocuente experiencia en la construcción del templo. La fábrica es de concreto armado con la abundancia de varillaje de hierro...”

A cerca del Convento el padre Lázaro indica: “El plano del Convento, concebido por el Padre Estanislao y ejecutado por el Hermano Rufo, es digno de todo aplauso. Se empezó a construir el cinco de agosto de 1911, adosado a la Iglesia y cuando ésta se hallaba a media altura. Se prosiguió con nuevo empuje el dos de enero de 1913... Muy lenta anduvo la obra durante los dos años que el Padre estuvo de conventual en Santiago; aunque el Padre Ludovico, que regentaba la casa por aquel entonces, se empeñó en arbitrar recursos. Vuelto a Chillán de Superior el 28 de septiembre de 1915, lo primero que hizo fué reanudar los trabajos...”

En agosto de 1913, siendo Superior el padre Ludovico, la Comunidad compró un órgano para la iglesia, previa venta del armonio.

Entre el 14 de enero de 1919 y octubre de 1921 la Comunidad efectuó diversos arreglos, se acabó de terminar el púlpito, se construyeron el altar gótico del Niño Jesús de Praga y un comulgatorio gótico, obra de Carrasco, un carpintero chillanejo; se hicieron los bancos del coro, etc.

LA EPOCA DE LAS BODAS DE PLATA

El día domingo 30 de marzo de 1930 se celebraron los “¡Veinticinco años gloriosos!”, como relata el padre Lázaro en su libro. “Fué de gratos recuerdos y grandes solemnidades por celebrarse en el Convento las Bodas de Plata de la Fundación. Mejor que nunca, podemos decir ahora que fué providencial y felíz esta Fundación Carmelitana en las márgenes del histórico Ñuble”.

Debido a la crisis mundial que afectó a Chile en la década de 1930, fue complicado que las familias pudieran costear los estudios de sus hijos en algún convento carmelita en España y de igual forma, que los propios carmelitas chilenos pudieran viajar para continuar sus estudios. Ante esta situación, la Orden Carmelita en Chile dio por fundada la Residencia Carmelita de Chillán el 23 de julio de 1930, siendo su primer Director el padre Gervasio de la Asunción, que dejó el cargo debido a una enfermedad en marzo de 1931, reemplazándolo el padre Bartolomé de Santo Domingo.

Continuando con esta decisión, el 31 de agosto de 1931 se constituía en Chillán el Colegio Teológico Carmelitano, tras haber llegado los padres teólogos Valentín, Agustín, Marcelo, Ricardo, Teresio, Enrique, Juan Bautista, Juan Tomás, José Miguel, José Luis y Jerónimo.

LOS TERREMOTOS

El templo y el convento afectados ya por el terremoto de Talca de 1928, se vieron seriamente dañados por el cataclismo del 24 de enero de 1939, que terminó por arrasar casi completamente a la ciudad de Chillán, destruyendo la Catedral San Bartolomé y otras iglesias.  

Recién en 1955, con motivo del aniversario 50º de la fundación carmelita en la ciudad, se inauguran los dos nuevos campanarios de la iglesia.

Transcurridos los años y con otros sismos en la zona, el terremoto del 27 de febrero de 2010 azotó nuevamente con dureza a los carmelitas de Chillán. Aunque el conjunto Iglesia - Convento, donde destacan el templo y el bello trazado interior del claustro con su jardín, son considerados patrimonio histórico de la ciudad, a enero de 2019 ambos edificios se hallaban clausurados y en completo abandono, según lo muestran las fotografías tomadas por este autor en esa fecha.

FUENTES: “Historia del la Orden del Carmen Descalzo en Chile 1899-1935”, padre Lázaro de la Asunción, 1936; "Estado de la iglesia en Chile", Acción Católica, 1946; y “Con motivo de la conmemoración de los 50 años de la congregación carmelitana en Chillán”, revista “Vea” N.874, 11 de enero de 1956

UBICACION: Calle Rosas 558, entre calles Constitución y Libertad, cinco cuadras al poniente de la Plaza de Armas












FOTOGRAFIAS DE WFL, 26 ENERO 2019


LA IGLESIA CARMELITA Y LOS EDIFICIOS DEL CONVENTO



EL PARROCO DE CHILLAN PADRE VICENTE LAS CASAS

ALGUNOS PADRES DE LA COMUNIDAD CARMELITA

“Historia del la Orden del Carmen Descalzo en Chile 1899-1935”, 
padre Lázaro de la Asunción, 1936


ALGUNOS BOLETINES PARROQUIALES DE LOS CARMELITAS


FOTOGRAFIAS DEL INTERIOR DEL CONVENTO Y DE LA IGLESIA
Máximo Beltrán, 2010, en "Iglesia y Convento de los Padres Carmelitas - Chillán"






"El negro inverno 2012 que espera a Chillán", diario "La Discusión" de Chillán, 30 de octubre de 2011