IGLESIA CAPILLA
NUESTRA SEÑORA LA CANDELARIA
ISLA MANCERA
(Río Valdivia - Corral)
IGLESIA
CAPILLA NUESTRA SEÑORA DE LA CANDELARIA - ISLA MANCERA (RIO VALDIVIA - CORRAL)
Por
1552 fundaba Pedro de Valdivia la villa que lleva su nombre a orillas del río
Calle Calle, sin embargo, esta población se vio una y otra vez con el correr de
los siglos, asediada y destruida por los araucanos. Estos la arrasaron
totalmente en 1599, permaneciendo abandonada por más de 50 años.
Durante
éste tiempo la zona sólo fue visitada por algunos piratas. Un grupo de
corsarios holandeses, que mantenían una colonia en Brasil, intentaron
establecerse en la antigua Valdivia, no logrando su propósito debido también a la
hostilidad indígena.
Este
hecho alarmó a las autoridades de Santiago y Lima, por lo que el Virrey del
Perú, Pedro de Toledo, Marqués de Mancera, ordenó la fortificación del río que
comunicaba al abandonado pueblo con el océano Pacífico. La expedición enviada
para este efecto llegó a Corral el 6 de febrero de 1645.
LAS
FORTIFICACIONES DEL RIO
En
esta expedición venía el ingeniero Constantino Vasconcellos, que se estableció
en la isla frente a la bahía que conformaba la desembocadura del gran río
denominado también Valdivia.
En
esta isla, bautizada como "Mancera" en honor al Virrey, hizo los
estudios de la zona y proyectó diversas fortificaciones.
La
primera fortificación construida fue la de Mancera, suiguiéndoles los fuertes
de Corral, Niebla, Amargos y San Carlos.
En
1651 luego de algunos pactos con los indígenas, el gobernador Antonio de Acuña consideró
repoblar Valdivia.
En
1720 la población de estas fortificaciones y de Valdivia sufren del
desabastecimiento y de una hambruna, causada por el naufragio del navío que
traía gran cantidad de víveres, de la infertilidad de la tierra que en ese
tiempo no dio frutos y por los nuevos ataques de los indígenas.
En
1736 una peste llevó la enfermedad a la población y en 1737 un fuerte terremoto
asoló la región.
En
1742 el denominado "incendio universal" destruyó completamente la
villa de Valdivia.
Estos
desastres llevaron al gobernador de Chile, Domingo Ortíz de Rozas, a redactar
un informe en el que concluía sobre la situación de Valdivia diciendo: "Ni
la Plaza es plaza, ni las armas son armas, ni sus gentes son gentes". Era
un angustiosa proclama, en la que también se hacía notar la condición de
"las semidestruidas fortalezas de Niebla, Mancera y Baides".
En
1758 con la intención de remediar tan desastroza situación, el nuevo gobernador
Manuel de Amat hace trasladar a población de Valdivia a la isla de Mancera.
Esta migración "no estudiada", ponía a la población merced a las
enfermedades y de los incendios por la cercanía del polvorín.
La
formación de la Junta Real de Fortificaciones en 1768 marca el inicio de una
nueva repoblación de Valdivia.
La
guarnición de los fuertes la constituían muchos soldados que tenían sus familias,
y tanto en Corral como en Mancera, se fueron formando pequeños poblados. En
Corral se estableció así una escuela y en Mancera el Convento de San Francisco
(1767).
Luego
de haberse repoblado la villa de Osorno, a fines de enero de 1796 visitó
Valdivia el gobernador Ambrosio O´higgins, que ordenó mejorar las
fortificaciones del río.
LOS
INICIOS DE LA EPOCA REPUBLICANA
Los
españoles derrotados en 1818 en Maipú, huyeron al sur del río Bio Bío,
concentrando gran parte de sus tropas en Valdivia y Chiloé.
El
5 de febrero de 1820 el almirante Thomas Lord Cochrane combatiendo por la causa
republicana chilena, sobrepasa las fortificaciones españolas y avanza sobre la
ciudad de Valdivia. Este hecho permitió la toma de los fuertes del río y la
derrota definitiva realista en la zona sur continental.
La
independencia definitiva de Chile llega en 1826 con la derrota de los españoles
atrincherados en Chiloé.
NUEVAS
CATASTROFES
En
1835 y 1837 la región se ve nuevamente afectada por terremotos, que causan
serios daños.
En
Valdivia, dos grandes catástrofes marcan parte de sus principales hitos
históricos contemporáneos, el gran incendio de 1909 que arrasó con más de la
mitad de la ciudad y el terremoto maremoto del 22 de mayo de 1960.
LA
CATASTROFE DE 1960
En
la bahía de Corral, justo frente a la isla Mancera, se desató con furia el
maremoto del 22 de mayo de 1960, y en ella yacen varios barcos y cientos de
víctimas.
Mas
arriba, por el río Valdivia, se encuentran los restos del famoso buque
naufragado "Canelos", al que en los años 80 aún se apreciaban sus
cubiertas y que terminó en los 90 saqueado por ladrones en vez de haber sido
declarado Monumento Histórico.
Las
diversas olas que aquí formó el maremoto variaron entre los 1,5 y 8,5 metros de
altura, causando recogimientos de más de 50 metros.
Aquí
también se produjo "la hendidura del mar", que formó una "vaciante"
en donde cayeron el buque "Haverbeck" y el remolcador
"Pacífico", los que luego terminaron por hundirse. El patrón del
"Pacífico" sobrevivió al caer milagrosamente a una playa de la isla
Mancera. Mientras las casas a orillas de la costa en Corral, Amargos, Niebla y
Mancera fueron arrasadas por el mar.
LA
ACTUAL IGLESIA DE MANCERA
A
medida que se iba formando y consolidando la República, un grupo de pobladores
continuaron residiendo en Mancera.
En
1907 una imagen de la Virgen de la Candelaria fue obsequiada al poblador
Gregorio Risco por Felicinda Rodas, vecina de Valdivia.
El
año 1910 siete pobladores de la isla Mancera inician la construcción de una
capilla para albergar a Nuestra Señora de la Candelaria. Los vecinos Juan
Felipe Bravo, Abelino Marcos, Elso Vivanco, Gregorio Riesco, Epitacio Bórquez,
Godofredo Bórquez y Andrónico Risco; dirigidos por el padre Ignacio Valenzuela
Vio, párroco de Corral, le dan forma al humilde templo.
En
1929 se constituye en la isla la Sociedad de la Candelaria, dedicada a la
mantención de la capilla y a la organización de la Fiesta de la Virgen la
Candelaria, que se desarrolla en el mes de febrero de cada año.
LA
ISLA MANCERA
La
isla Mancera tiene 1.200 metros de largo por 550 en su parte más ancha y una
altura de unos 40 metros sobre el nivel del mar.
La
isla es un edén en medio del río Valdivia, donde existe un gran bosque de
enormes y antiguos canelos, arrayanes, avellanos y pinos, también algunos
árboles frutales y pequeñas playas.
Mancera
es una Zona Típica Patrimonial y en ella no hay más de 70 casas. No hay
producción agrícola ganadera y sólo se encuentran pequeños huertos familiares y
aves de corral. Su población de dedica a la pesca, a la actividad forestal en
los fundos cercanos y a diversas actividades en los servicios públicos y
privados de Corral, Niebla y Valdivia. Algunos pocos se dedican también a
atender al turismo y a elaborar artesanía.
Frente
a la capilla se encuentra el ingreso al antiguo fuerte San Pedro de Alcántara.
Este
fuerte quizá sea el único gran monumento en Chile que tiene la huella medieval
europea, con esa callejuela empedrada que desde el embarcadero nos lleva al pórtico
de ingreso. En su interior destaca la gran explanada en las que se encuentran
las ruinas de la Casa del Gobernador, la Casa de Oficiales, el polvorín y los
conventos San Francisco y San Agustín. Se pueden ver perfectamente las gruesas
murallas y torreones del fuerte, el calabozo y las murallas externas de la
iglesia San Antonio. El bello pórtico mayor medieval de esta iglesia y su arco
terminaron por caerse con el terremoto de 1960.
En
su época de gloria, la fortificación de Mancera llegó a tener un hospital, un
almacén, una panadería, una carpintería donde incluso se construían
embarcaciones y una fragua que también elaboraba cañones y balas.
FIESTAS
RELIGIOSAS:
-
Febrero. Fiesta de La Candelaria, asisten pescadores y campesinos, hay misa y
procesión, cocinerías y una feria de comercio.
-
Junio. Fiesta de San Pedro, con la asistencia de pescadores y marinos
mercantes, hay una procesión desde la capilla a diversas embarcaciones que
navegan hacia Corral, lanzando ofrendas florales al mar en recuerdo de sus
deudos
FUENTES:
"Fortificaciones coloniales en el puerto de Corral", revista "En
Viaje" de Ferrocarriles del Estado N.27, enero de 1936; "La historia
del heroísmo español perdura en los destruidos fuertes de Corral", revista
"En Viaje" N.122, diciembre de 1943; "Fuertes coloniales de
Valdivia", revista "En Viaje" N.220, febrero de 1952;
"Historia de Valdivia", Fernando Guarda Geywitz, 1953; "Corral,
rutas naturales y culturales", N.1, 2009, Oficina de Turismo, Municipalidad
de Corral; "Historia de Valdivia", Julio C. Avendaño,
www.historiadevaldivia-chile.blogspot.com; “El maremoto del 22 de mayo de 1960
en las costas de Chile”, Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de
Chile, 2000 (en "Terremoto - Maremoto de Valdivia, 22 de mayo de
1960", www.chile-catastrofes-tragedias.blogspot.com); "Capilla
Nuestra Señora la Candelaria", Sociedad de la Candelaria, Mancera, 2003;
"Folclor Religioso Chileno", Oreste Plath, 1996; y "Santuarios y
Fiestas Marianas de Chile", Juan Guillermo Prado, 1993
La iglesia y el fuerte desde el río Valdivia
LA CALLEJUELA DE PIEDRA DESDE EL EMBARCADERO
*** RESEÑA DEDICADA A MI MADRE REINA CECILIA LIEBSCH TAPIA ***
LA ISLA MANCERA
Vista desde el fuerte en la isla hacia la bahía de Corral y desembocadura del río Valdivia,
a la izquierda se ubica Corral y a la derecha Niebla
Los añosos bosques de Mancera
Mi madre Reina y mi hermana Lorena junto al pino de más de 20 metros de altura
y con un diámetro de tronco basal de 1,50 mts.
(mapa CHILETUR COPEC 2013)
Iglesia San Antonio
El pórtico y arco medieval de la antigua iglesia San Antonio que fue destruido por el terremoto de 1960
(Revista "En Viaje" de Ferrocarriles del Estado N.122, dic. 1943)
Calabozo
Antiguo plano de Mancera
("Historia de Valdivia", Fernando Guarda, 1953)
La antigua siderurgia, los Altos Hornos de Corral
(Revista "En Viaje" de Ferrocarriles del Estado N.158, dic. 1946)
LA ANTIGUA COMPAÑIA NAVIERA DEL RIO VALDIVIA
DURANTE LA HENDIDURA Y EL VACIAMIENTO DEL MAREMOTO DE 1960
("El maremoto del 22 de mayo de 1960 en las costas de Chile", SHOA, 2000)