IGLESIA
EPIFANIA DEL SEÑOR
PROVIDENCIA - SANTIAGO
IGLESIA EPIFANÍA DEL SEÑOR, PROVIDENCIA, SANTIAGO
En el año 1891, impulsada por la encíclica Rerum Novarum del Papa León XIII que llamaba a tomar conciencia social de los obreros y a resolver las dificultades sobre sus condiciones de vida, comenzó la construcción por etapas de uno de los primero conjuntos habitacionales sociales del país en Santiago.
La primera etapa, que fue inaugurada el 21 de Noviembre de 1891, fue posible gracias a los aportes de Melchor Concha y Toro, antiguo ministro de Hacienda del gobierno del presidente José Joaquín Pérez y que había ingresado al negocio vitivinícola trayendo cepas francesas de Burdeos para plantarlas en el valle del Rio Maipo, naciendo la Viña Concha y Toro. Posteriormente, el conjunto habitacional se amplió gracias a los aportes de los benefactores Manuel José Irarrázaval y Eduardo Marín.
En 1916, celebrando los 25 años de la Institución León XIII, se inaugura el 25 de junio la Parroquia de la Epifanía del Señor, construida para conmemorar el aniversario, con una misa a cargo del Capellán Carlos Casanueva.
En el patio de la Parroquia, y junto con la celebración de los 25 años de la población León XIII se colocó un busto de Melchor Concha y Toro en agradecimiento por su apoyo en la creación del conjunto habitacional con una placa que, junto con el reconocimiento a los benefactores, se lee: “Homenaje de gratitud de la población León XIII a su fundador don Melchor Concha y Toro”.
En el año 1997, bajo las constantes peticiones de los pobladores de la zona, el barrio fue declarado Zona Típica y su Parroquia Monumento Nacional, principalmente por su importancia social dentro del centro de Santiago en la historia habitacional y por mantener su forma original y remembranza de una tipología de capilla de “Campiña Europea Francesa”.
Hoy, después de los terremotos acontecidos en 1985 y 2010, la Parroquia ha tenido labores de restauración y embellecimiento, pero lamentablemente ha sido afectada por saqueos. Se encuentra funcionando y se puede apreciar el busto de homenaje en su patio lateral.
El arquitecto encargado de la construcción de la obra fue Enrique Mardones y Herrero, y es probable que para realizar esta parroquia haya reutilizado el edificio existente de la antigua Escuela Mercedes Guzmán, agregándole el frontón de acceso y la torre con su campanario.
Es un volumen rectangular simple, realizado en muros de adobe y estructura de madera para la techumbre y terminaciones, con ventanales a lo largo de su muro externo y coronado con un techo a dos aguas. En la puerta de entrada se observa el frontón de acceso al estilo neoclásico, el cual se conforma de cuatro pedestales sobre los cuales se ubican columnas de un estilo no muy definido, de las cuales las dos posteriores están adosadas al muro de la iglesia. En estas columnas descansa el frontón triangular que, en su parte central, posee un disco decorativo con la imagen de Jesucristo. Se corona un pequeño tejado a dos aguas. Sobre el frontón se observa un óculo que permite la entrada de luz al interior. A uno de sus lados se encuentra la torre campanil que, siendo un paralelepípedo simple, se puede dividir en tres partes: la parte inferior con una ventana tipo nicho rematado en arco de medio punto moldurada, la parte superior, separada de la inferior por una cornisa decorativa, posee otra ventana rematada en arco de medio punto moldurada. Remata el conjunto el chapitel de forma piramidal de cuatro lados con alero que lo separa de la parte inferior de la torre.
Interiormente, el templo posee una nave con techo adintelado con vigas a la vista rematadas a ambos lados por escuadras decorativas. Sobre la entrada se encuentra el balcón que contiene el órgano. A través de uno de sus muros laterales se abren espacios para ventanas rematadas en arcos de medio punto que dan la luz en el interior, enfrentándose al otro muro lateral que posee nichos donde se colocan altares devocionales.
Existe una separación mediante la nave y el presbiterio mediante un arco rebajado que descansa sobre un pedestal con columna, friso y cornisa. Al lado derecho del altar se ha realizado una extensión con asientos para más feligreses en el caso que se realice alguna otra actividad pastoral.
El trabajo decorativo de la Parroquia es bastante austero. Principalmente es el color el que juega un rol preponderante en la ornamentación. Sus muros están pintados de color blanco, el techo de celeste en contraposición a las vigas que son de tono ocre. Los remates ornamentados de las vigas están pintados en esta mezcla de tono celeste y ocre. Todo el borde del arco divisorio, así como las columnas en las cuales descansa, borde y vigas del techo sobre el altar se encuentran remarcados en el tono ocre, dándole realce y contraste a ciertas zonas del interior.
A ambos lados de la puerta de entrada se pueden observar pequeños altares dedicados a la Virgen María a un costado y a San Expedito en el otro. En el balcón sobre la puerta, se aprecia el órgano fabricado por Oreste Carlini, el cual actualmente no se encuentra en uso.
En el muro izquierdo se encuentran las ventanas. Cada una de ellas se encuentra dividida en dos paneles los cuales, en su parte superior, se observan discos con vitral mostrando escenas del Vía Crucis. El muro derecho hay dos nichos: uno parece ser una puerta clausurada; el otro está dedicado a un altar con la imagen de Nuestra Señora del Carmen.
El altar es bastante sencillo, sin gran decoración. Destaca en el muro un conjunto monocromático de madera sobre la Sagrada Familia con los Reyes Magos que es rodeado por un arco pintado en tono ocre. Interesantes son las dos sillas y el sillón frailero que se encuentran a un lado del altar, con sus travesaños anteriores tallados y calados.
En la parte posterior del anexo que se encuentra al lado del altar, se observa un altar con la figura de Santa Teresa de los Andes, y en la otra esquina uno con una lámina enmarcada del Sagrado Corazón de Jesús.
(DOCUMENTO DE: www.iglesiaspatrimoniales.cl, Leticia Martínez y Cristian Díaz, 2011)
UBICACION: Barrio Bellavista, calle Bellavista 488, entre calles Melchor Concha y Toro y Arzobispo Casanova (frente a Clínica Santa María), Providencia, Santiago.
(FOTOGRAFIAS DE 2014)